La investigación educativa actual, cada vez más interdisciplinaria y global, tiene grandes desafíos y
oportunidades, asociados a los
1.- avances tecnológicos y científicos en áreas emergentes como inteligencia.
artificial, aprendizaje automático, biotecnología, bioética, nanotecnología o energías renovables.
2.- problemas urgentes o globales: como el cambio climático, la
seguridad alimentaria, la salud pública, la pobreza, la
desigualdad o la migración.
3.- meta-análisis o revisiones
sistemáticas que sintetizan y analizan la evidencia de múltiples estudios sobre un tema educativo específico.
4.- investigación pionera, refiriéndonos a esa investigación
que abre nuevos caminos, y descubre nuevos conceptos
o presenta resultados innovadores. En este sentido INVESTIGAR EN EDUCACIÓN es un proceso que requiere cada vez mayor rigor, compromiso y ética, ante ello, se posiciona por su alto valor estratégico la COMPETENCIA EPISTÉMICA DEL INVESTIGADOR.